¿Cómo alcanzar tus metas? 13 estrategias que te ayudarán a lograrlo.

Cada año trae la oportunidad de plantearse metas, algunas de ellas se repiten año tras año y otras son nuevas, el simple hecho de imaginar lo que puedes llegar a alcanzar es un proceso emocionante.

Sin embargo, cuántos de estos sueños no se quedan sin cumplir, cerrando el año habiendo logrado pocos o ninguno de los objetivos. Estas estrategias te aseguran conseguir tus metas deseadas. 

Al final del artículo compartiré contigo una herramienta que puede ayudarte a acelerar el proceso para alcanzar tus objetivos.

Conoce las 13 estrategias que necesitas para alcanzar tus metas:
  1. Antes de escribir nuevas metas, haz un cierre de año.
  2. Escribe tus nuevas metas para este nuevo año.
  3. Escribe tus metas más de una vez.
  4. Crea un plan.
  5. No puedes pensar en fabricar la casa si aún no tienes la base.
  6. Cambia tu perspectiva de gratificación instantánea a gratificación a largo plazo.
  7. Grandes objetivos divididos en pequeños objetivos.
  8. Una de las mejores formas de reducir el tiempo en lograr tu objetivo es…
  9. Que alguien te haga responsable.
  10. Consigue una actitud de hacer lo que sea necesario.
  11. La ley que tienes que entender si quieres cambiar tus hábitos.
  12. Cambia tu perspectiva.
  13. Empieza hoy, no tienes que esperar a final de año.

La buena noticia es que este nuevo año tienes la oportunidad de cambiar y conseguir esas metas recurrentes que te planteas año tras año o conseguir metas más grandes.

Visita la sección de recursos de expande tu mente para que explores nuevos programas que te ayudarán, sin lugar a duda, a alcanzar tus metas más rápido.

1. Antes de escribir nuevas metas, haz un cierre de año.

Como en toda empresa, a final de año se hace un balance financiero, una foto que retrata el estado de salud de la compañía antes de poder pensar en los objetivos para el nuevo año.

De la misma manera que lo hacen las empresas tienes que hacerlo en tu vida, lo común es pensar en lo que quieres conseguir, sin pensar en tu situación actual y lo que hiciste este año que ya pasó, para ir a un destino primero tienes que saber dónde estás.

Antes de sentarte a decidir que quieres, siéntate a pensar que conseguiste este año, que hiciste o que dejaste de hacer, las acciones o inacciones que te han llevado a donde estás hoy.

Es importante que este ejercicio se haga escrito, es como vaciar tus pensamientos en papel y que quede plasmado lo que hiciste bien y lo que no.

Para ayudarte a este proceso, puedes dividirlo en tres áreas para hacerlo lo más sencillo posible, luego a medida que consigas resultados puedes empezar a extender en otras áreas en las que quieras mejorar.

Puedes dividirlo en tres áreas principales: salud, dinero y relaciones, o cuatro si quieres añadir la parte espiritual.

En cada una vas a escribir:
  1. Lo que querías conseguir en esa área cuando empezó el año.
  2. Lo que hiciste para conseguirlo.
  3. Y qué hiciste que va en contra de lo que quiero conseguir.

Por ejemplo, si en el área de la salud tu objetivo es conseguir tu peso ideal, puedes estructurarlo de la siguiente manera:

Objetivo

Conseguir mi peso ideal de 75 Kg con 10% de grasa corporal.

¿Qué hice para conseguirlo?

Hacer ejercicio cinco veces a la semana.

Alimentación sana.

Dormir 8 horas de lunes a viernes.

¿Qué hice que iba en contra del objetivo?

Consumir azúcar todos los días.

No dormir lo suficiente los fines de semana.

Consumir alcohol en exceso los viernes por la noche.

Este ejercicio te servirá para darte cuenta de los puntos débiles y fuertes.

El objetivo es identificar tus hábitos, probablemente tienes hábitos buenos que te ayudan a avanzar a tu objetivo y hábitos malos que frenan tu progreso.

En el ejemplo anterior tienes el hábito de hacer ejercicio todos los días pero a pesar de eso no estás consiguiendo tu objetivo porque tienes hábitos que van en contra de lo que quieres conseguir.

Una vez identificados los malos hábitos y los cambias, es como soltar el freno.

Un solo hábito puede ser la única barrera entre donde estás y dónde quieres llegar. Si logras identificarlo y cambiarlo habrás ganado.

2. Escribe tus nuevas metas para este nuevo año.

Una vez identifiques dónde estás y qué has estado haciendo, es hora de decidir a dónde quieres ir.

Sin embargo no es suficiente con pensar en lo que quieres, tienes que plasmarlo en una hoja y escrito a mano preferiblemente, las probabilidades de que logres conseguir tu objetivo se incrementan con el simple hecho de escribirlo.

Para conseguir un resultado hay que tomar acción (no solo pensar) y escribir es la primera acción para materializar lo que quieres.

Si un ingeniero civil quiere construir una casa ¿qué es lo primero que hace? dibuja en papel el diseño de lo que quiere conseguir. El mismo proceso que usa un ingeniero para construir, es el que tienes que usar para transformar la idea de lo que quieres en realidad.

3. Escribe tus metas más de una vez.

Escribir metas es algo que funciona y a veces funciona como magia, si quieres acelerar el proceso y asegurarse de conseguir lo que quieres, una de las mejores técnicas es escribirlo más de una vez.

Si piensas en algo que quieres y luego no lo piensas más, cómo pretendes conseguirlo. Muchas personas se plantean objetivos a principios de año y para febrero ya olvidaron todo lo que habían dicho que querían lograr este nuevo año.

Tienes que recordarte constantemente a donde quieres ir y aquí es donde la magia sucede.

Escribir tus metas de forma recurrente te ayudará:

Mantenerte enfocado

Tomar acción. Cuando te repites a ti mismo una y otra vez que tienes que hacer algo, terminas haciéndolo.

Encontrar oportunidades. Cuando estás pensando en algo constantemente comienzas a conocer gente y a atraer recursos para que tu visión se vuelva realidad. Es como si alguien te guiará a conseguir el objetivo.

Si no tienes experiencia en fijación de metas puede sonar exagerado, pero es verdad, haz la prueba.

4. Crea un plan.

¿Cuál es el siguiente paso del ingeniero para construir la casa?

Una vez que tienes el diseño (lo que quieres) es hora de bajarlo de ideas a un plan.

En el caso del ingeniero tiene que decidir qué materiales necesitas, quien tiene que contratar para que realice ciertas actividades, hacer presupuesto y los pasos que tiene que seguir en un orden específico.

Si por ejemplo tu meta es mejorar tu físico, tienes que decidir qué tipo de físico quieres desarrollar, si vas a necesitar pesas, barras o Kettlebell, si vas a comprar proteína en polvo, vitaminas, creatina.

Tendrás que ver, si quieres contratar un entrenador personal, un nutricionista o buscar un compañero para entrenar.

Hacer un presupuesto de todo los gastos (o inversión depende de como lo quieras ver) que tienes que hacer.

Y finalmente los pasos a seguir, si no has entrenado durante mucho tiempo, no puedes pensar en ir al gimnasio cinco veces a la semana, tendrás que empezar por dos o tres, con poco peso, pocas repeticiones e ir paso a paso aumentando progresivamente.

Este es el proceso mental que tienes que llevar en cada una de tus metas ya sea financiera, salud, relaciones o cualquier área.

Sabes que el proceso funciona porque se ha usado durante la historia para crear todo lo que vemos a nuestro alrededor.

Y recuerda, colocar el plan por ESCRITO.

5. No puedes pensar en fabricar la casa si aún no tienes la base.

Muchas veces se comete el error de tratar de querer conseguir el objetivo sin trabajar primero en la base. Lo primero que quieres hacer es construir las paredes y el techo pero este enfoque sabes que no te llevará a construir una casa que perdure para toda la vida, el primer viento (dificultad) que encuentres derrumbara la casa.

Por ejemplo, querer bajar 10 Kg en un mes sin primero tener el hábito de la buena alimentación y el ejercicio, quieres triplicar tu ingreso sin primero tomar el tiempo de adquirir las habilidades necesarias o quieres mejorar una relación de una día para otro sin dedicarle atención diariamente.

Hay dos problemas con querer conseguir objetivos rápidos el primero es que si no lo consigues rápido pierdes motivación al no ver resultados.

Y el segundo es que si logras conseguirlo por ejemplo bajar de peso rápidamente, volverás a ganar todo rápidamente, lo que fácil llega fácil se va.

6. Cambia tu perspectiva de gratificación instantánea a gratificación a largo plazo.

Es importante establecer un límite de tiempo cuando creas una metas, sin embargo en la sociedad que vivimos todo está enfocado a la gratificación instantánea, como por ejemplo programas de abdominales en 30 días o haz dinero fácil y rápido.

Esta estrategía trata de la mentalidad que hay que tener cuando trabajas en dirección a un objetivo. Y evitar la mentalidad de gratificación instantánea es esencial para lograr grandes objetivos.

Cuando pienses en un objetivo decide desde el primer momento que te va a tomar un año conseguirlo, que vas a hacer todo lo necesario para conseguirlo antes pero si no lo ves en tres meses no pasa nada porque sabes que mínimo necesitas 12 meses de constancia y dedicación.

Cambiar el deseo de gratificación instantánea a largo plazo libera tu mente y te prepara para mantenerte enfocado en una actividad durante un largo periodo de tiempo, mejorando tus posibilidades de conseguirlo.

7. Grandes objetivos divididos en pequeños objetivos.

No puedes pretender comerte un elefante de un solo bocado, si tu objetivo es grande (que debería serlo) divídelo en pequeños objetivos y celebra cada logro.

Pequeños objetivos te ayudará a ver pequeños resultados a corto plazo lo cual es un gran incentivo y el hecho de celebrarlo saciará ese deseo de gratificación instantánea a la que estás acostumbrado.

En ocasiones puede sentirse abrumado con objetivos demasiado grandes y esa sensación da como resultado que se dejen las cosas para después.

El libro «Tráguese ese SAPO» de Brian Tracy es un buen complemento para esta lectura si eres de los que posterga las acciones más importantes para otro día.

8. Una de las mejores formas de reducir el tiempo en lograr tu objetivo es…

Cuando quieres conseguir algo nuevo, existe un camino que recorrer, el problema es que no conoces el camino y si no tienes un mapa y una brújula o un guía que te diga a donde ir, tendrás que pasar por la fase de ensayo y error.

La fase de ensayo y error consume mucho tiempo y a largar el periodo que necesitas para alcanzar tu meta.

Imagina que intentas subir el monte Everest, tu meta es llegar a la cima, estás en excelentes condiciones físicas, con años de entrenamiento en montañas. Y llega el día en el que te sientes preparado para subirlo, el problema es que no sabes el camino, ni lo que te vas a encontrar.

Comienzas a subir y de repente te has perdido, no sabes por dónde vas, llegas a un lugar donde no puedes continuar, te tienes que regresar e ir por otro lado y resulta que has ido por la ruta más larga, el camino se hace infinito y lo que has escuchado del tiempo que lleva subir el Everest, ves que a ti te esta tomando el doble o el triple en conseguirlo.

Cuando ves que tardas más de lo que deberías, te agotas física y mentalmente, y si no tienes una voluntad de hierro, desistes.

No habría sido más fácil, comprar un libro de alguien que ya ha subido el Everest múltiples veces y conoce cada camino, leerlo, ver por donde tienes que ir y luego recorrer el mismo camino que te indican.

Una hora de lectura puede ahorrarte horas de camino.

O mejor aún, contratar al que escribió el libro y que te guíe personalmente a la cima.

Encontrar personas que ya están donde quieres llegar, es la mejor manera de reducir el tiempo que te toma conseguir un objetivo.

Uno de mis libros preferidos es «Los principios del Éxito: Cómo llegar de donde estas a donde quieres ir» de Jack Canfield una semana de lectura y por un precio menor a un almuerzo en Burger King puedes aprender 64 principios que han usado las personas exitosas a través de la historia.

9. Que alguien te haga responsable.

Existen varios tipos de personas, están los que se proponen una meta, se hacen responsables y si se dicen a sí mismo que van a hacer algo y lo hacen para no quedar mal con ellos mismos.

Y están las personas que han confesado que si no hay alguien externo que los empuje es muy fácil para ellos no cumplir un objetivo porque no hay algo externo que los mueva.

Si es tu caso, es importante que hagas público tu objetivo, dile a alguien que te mantenga responsable por lo que tienes que hacer. Coloca tus objetivos en tus redes sociales, compártelo con amigos y familiares.

10. Consigue una actitud de hacer lo que sea necesario.

Tienes que conseguir la actitud de «hacer lo que sea necesario» para alcanzar el objetivo. Si tienes que levantarte a las 4 AM todos los días y es lo que necesitas hacer para conseguirlo lo harás, si necesitas decirle a alguien más, si tienes que poner dinero, dedicar más horas de trabajo, lo que sea necesario.

Hay un amigo que quiere entrenar todos los días por las mañanas para prepararse para un triatlón sin embargo le cuesta mucho despertarse y si tiene el despertador al lado lo que haces es apagarlo y seguir durmiendo.

Su nueva rutina es colocar la alarma a máximo volumen en el baño, esto lo obliga a levantarse si o si, y una vez llega al baño ya no le queda más remedio que empezar el día.

Otras personas colocan las zapatillas para correr al lado de la cama, de esa manera cuando se levantan lo primero que tienen para colocarse son las deportivas, lo que les recuerda que lo primero que tienen que hacer es salir a correr.

Hay que ser un poco creativos a la hora de preparar el escenario que te induzca a actuar, pero lo más importante es conseguir esa actitud de hacer lo que sea necesario, cuando consigues esa actitud empezarás a pensar nuevas formas de hacer cosas que te obliguen a hacer lo que tienes que hacer.

Cuando consigues una actitud de hacer lo que sea necesario, muy pocas personas te entenderán, si conoces a Grant Cardone y has leído uno de sus libro «obsesionate o se promedió» sabes de lo que hablo, como dice Grant, estamos en medio de una epidemia promedio. La sabiduría convencional es buscar el equilibrio y tomarlo con calma. Pero eso realmente nos ha dado una excusa para no ser excepcional.

11. La ley que tienes que entender si quieres cambiar tus hábitos.

Hay una ley de la cual he escrito anteriormente y me gusta repetirla porque es de suma importancia, se llama la ley del sacrificio.

Velo de la siguiente manera, tus 24 horas del día ya están siendo utilizadas para algo, independientemente de lo que sea, puedes estar dedicando 1 hora a ver Netflix y 2 horas a redes sociales y lo que esta ley dice es que para conseguir algo nuevo tenemos que sacrificar algo viejo.

Tienes que dejar ciertas actividades y cambiarlas por otras, si te levantas todos los días a las 7 AM y tu objetivo es empezar a entrenar todas las mañanas, tendrás que sacrificar una hora de sueño, empezar a levantarte a las 6 AM, a cambio de tener una hora para entrenar.

Si tu objetivo es comer más sano, tendrás que sacrificar la comida chatarra a cambio de comida sana. Si te quieres independizar y tener tu propio negocio, tendrás que sacrificar tu empleo y tu «seguridad laboral» a cambio de construir tu imperio.

Es un concepto que a veces cuesta entender, las personas ven la palabra sacrificar como algo malo, cómo hacer un gran esfuerzo, pero es todo lo contrario.

Sacrificar actividades de poco valor por actividades de alto valor es lo que te llevará a conseguir lo que quieres y en consecuencia serás más feliz.

12. Cambia tu perspectiva.

Algo que me ha funcionado y espero que te ayude a ti también.

Cuando analizas el año que pasó y ves que no has alcanzado las metas que quieres. Pregúntate ¿qué pasaría si los resultados que conseguí este año y el comportamiento que tuve se repiten una y otra vez cada año?

Pueden pasar 10, 20 o 30 años y no alcanzar tus objetivos.

Si pasas un año sin lograr tus objetivos quizás no pasa nada, tienes otro año para conseguirlo. Pero ver un año es como ver el árbol y no ver el bosque, si piensas en todos los años que han pasado proponiendo una meta ya sea estar en forma o dejar tu empleo actual o dejar de fumar o beber alcohol y pasas año tras año pensando lo mismo significa que que falta algo que no estás haciendo y esto se puede traducir en un vida sin conseguir lo deseado.

Cuando cambias la manera de ver las cosas, tus acciones cambian, la sensación de saber que si sigues haciendo lo mismo del año pasado puede convertirse en una vida sin alcanzar tus metas, hace que levantarte temprano, que ir al gimnasio, que comer más sano, sea más fácil.

13. Empieza hoy, no tienes que esperar a final de año.

¿Por qué esperar a final de año para proponerte un cambio en tu vida?

No esperes a una fecha, empieza hoy.

El mejor momento para empezar a hacer algo es HOY. Muchas personas esperan a que se alineen los planetas y las condiciones perfectas se den  para hacer algo.

El problema con esto, es que las condiciones perfectas puede que nunca lleguen.

Si no puedes correr hacia tu objetivo, camina, si no puedes caminar, gatea.

Lo importante es hacer algo que te mueva en dirección que quieres ir.

Si pensabas esperar a principios de año para empezar el gimnasio y disfrutar de unas navidades llenas de celebraciones, cambia tu enfoque y empieza hoy.

Pasa unas navidades entrenando y para enero ya tendrás un mes de ventaja. Recuerda que no puedes repetir lo mismo que el año pasado.

Cuando llega diciembre, velo como el mes para darlo todo para tratar de conseguir esas metas deseadas antes de finalizar el año, en vez de esperar a que llegue enero para retomarlas.


Finalmente, espero que este nuevo año sea el año en que consigas todos tus objetivos y  que esta guía te ayude a conseguirlo.

Lee los pasos más de una vez para asegurarte de recordarlos y ponerlos en práctica.

La herramienta para ayudarte a acelerar la velocidad en que alcanzas tus objetivos, se llama mindzoom. (El enlace te llevará directamente al programa, puedes cambiar el idioma a español).

Este programa te permite recibir más de 18 mil afirmaciones al día, sin esfuerzo de tu parte y está diseñado para influenciar tu mente.

Para mi es como tener un entrenador afirmándome constantemente que tengo que tomar acción y sin necesidad dejar de hacer lo que tengo que hacer.

Puedes aprovechar esta nueva tecnología para ser más positivo, más optimista, mejorar tu actitud, ser más agradecido, aumentar tu confianza y autoestima, ser más exitoso, tener más disciplina, no hay límites para lo que puedes afirmar.

Si quieres aprender a acceder al máximo potencial de tu mente, visita la sección de recursos en expande tu mente para que veas los diferentes programas que te pueden ayudar a eliminar creencias limitantes, cambiar hábitos y/o reprogramar tu subconsciente.

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