¿Por qué es importante el perdón para el crecimiento espiritual?
Perdonar es una práctica fundamental para las personas que están decididas a avanzar y crecer en el camino espiritual.
El perdón es una de las prácticas más importantes del crecimiento espiritual. Es esencial para sanarnos a nosotros mismos y a nuestras relaciones. Cuando perdonamos, liberamos la ira, el resentimiento y la amargura que albergamos dentro de nosotros. Esto nos permite seguir adelante y vivir nuestras vidas de una manera más positiva.
La disposición a perdonar es un signo de madurez espiritual y emocional. Puede que seas de los que piensa que los demás no merecen tu perdón, y quizás sea cierto, pero no se trata de los demás, se trata de ti, de que alcances la paz interior y te permitas crecer espiritualmente.
Importancia del perdón
A través del perdón comienzas a liberarte de los sentimientos negativos que albergan dentro de ti como resentimiento, odio, deseo de venganza, esos sentimientos solo traen amargura y dolor a tu vida. Tienes la solución en tus manos, una herramienta que te aliviará, liberará y sanará las heridas de tu corazón se llama «perdón», y de ahí su importancia.
Perdonar a alguien, ya sea a nosotros mismos y a otros son los aspectos más importantes para tu crecimiento espiritual. Puede ser uno de los actos más difíciles de afrontar, pero a su vez el más necesario.
Perdonar es una decisión personal y podrás hacerlo cuando te sientas listo para seguir adelante, cuando decides que el amor en tu corazón hable más fuerte que el odio, la ira o cualquier sentimiento negativo que no te permite avanzar.
Una historia inspiradora es la de Nelson Mandela, quien enseñó con su ejemplo la importancia del perdón.
Cuando salió de prisión, donde estuvo encarcelado por 27 años, aislado y realizando trabajos forzados, contrario a buscar vengarse dijo:
«Al salir por la puerta hacia mi libertad supe que, si no dejaba atrás toda la ira, el odio y el resentimiento seguiría siendo un prisionero».
Más tarde promovió entre su gente el perdón y la reconciliación. Las sabías palabras de Mandela nos recuerdan que el único prisionero es la persona que no puede perdonar y es algo fundamental de entender, el perdón no lo haces por otra persona, lo haces por ti, para sentirte en paz contigo mismo.
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El perdón abre el camino al Crecimiento Espiritual
Cuando una persona se siente ofendida o herida por otra, lo primero que siente es dolor, seguidamente se llena de frustración, rabia, odio y hasta deseos de venganza, como ves todos son sentimientos negativos que enferman a la persona que está herida, no al que produjo la ofensa.
Estos sentimientos se quedan con la persona que los sientes hasta el día en que use el perdón para liberarlos, de lo contrario los sentimientos seguirán allí reprimidos.
Es importante buscar contrarrestar los sentimientos negativos y generar pensamientos positivos para sanar tu espíritu. Cuando perdonas: Dejas ir toda la negatividad a la cual te aferras; Te permite superar el daño y el dolor que has experimentado; tiene la capacidad de sanar tu interior, abriendo la puerta para crecer y sentirte feliz; Dejas de obstruir tu crecimiento espiritual porque ya no estás lleno de energía negativa.
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Perdonar a alguien por el daño que nos causó extingue el daño pasado, te permite dejar ir el dolor. Te da la capacidad de mirar hacia adelante en lugar de insistir en recordar tu pasado, disfrutar el presente, dando paso a un nuevo crecimiento, que te ayudará a prepararte para un mejor futuro.
Al perdonar a los demás o a nosotros mismo, estamos dejando de lado la ansiedad, el resentimiento y la ira, para dar paso a las virtudes espirituales como el amor, la generosidad, amabilidad, aprendes a escuchar y ser más empático.
¿Cómo practicar el perdón?
Sabemos que aprender y llevar a efecto el perdón, no es una tarea fácil, pero tampoco imposible, solo debes estar decidido a querer hacerlo, luego requiere tiempo y poner en práctica actividades que te permitan avanzar.
La doctora Sonja Lyubomirsky, psicóloga, autora del libro «La ciencia de la Felicidad» propone en él varias técnicas de cómo practicar el perdón, sugiere elegir una sola técnica, la que pueda adecuarse mejor a tu personalidad.
Hemos seleccionado dos de ellas, las que consideramos más sencillas para aplicar: «escribir una carta de perdón» y «apreciar ser perdonado».
Escribir una carta de perdón es una técnica que tiene por finalidad desprenderte de tu rabia, odio, amargura y culpa, escribiendo una carta de perdón a una persona que te haya hecho daño. Piensa en una persona que te haya herido y dirige a ella la carta.
Describe lo que ocurrió, cómo te afectó y cómo te sigue afectando en el presente, escribe todo lo que sientes y qué te gustaría haberle dicho en su momento, esta carta no la enviaras, por lo tanto puedes ser lo más sincero posible.
Una vez expresado todo tu dolor, concluye la carta diciéndole que la perdonas, libérate del rencor, y di que deseas resolver y cerrar la situación.
Puede que en principio te cueste escribir la carta a la persona que seleccionastes porque consideres que no merece tu perdón, si es así, deja la carta aun lado y vuelve a intentarlo otro día. También puedes cambiar y seleccionar a otra persona que te sea más fácil perdonar.
Apreciar ser perdonado es otro buen ejercicio para iniciar técnicas de perdonar, consiste en recordar una situación en la cual fuiste perdonado y pediste perdón.
Al recordar ser perdonado, piensa cómo te sentiste, qué beneficio y aprendizaje te dejó el ser perdonado y cómo percibes en la actualidad esa experiencia.
Con respecto a pedir que te perdonen, lo puedes hacer escribiendo una carta donde describes el daño que has hecho a la otra persona.
Seguido de una disculpa, reconociendo la naturaleza de tus acciones, y qué acciones vas a tomar para reparar el daño. Esta carta puedes o no enviarla, será tu decisión. A veces no es posible, o puedes considerarlo poco prudente.
Otra forma de aprender a perdonar es leyendo sobre personajes públicos que son reconocidos por practicar el perdón, como es el caso de Nelson Mandela, Mahatma Ghandhi, Martin Luther King, jr. entre otros, los cuales te inspirarán a seguir su ejemplo.
¿Cómo saber que has perdonado?
Solo cuando perdonas desde tu corazón sabrás que has perdonado. Lo sabes cuando cambia tu forma de pensar hacia la persona que te ofendió o te causo dolor es decir, te das cuenta que los deseos negativos que genera esa persona desaparecen.
Por otra parte, sientes una emoción en lo profundo de ti, una sensación de paz al dejar ir los sentimientos negativos que no te permiten avanzar, como quitarte un peso de encima.
Analiza si estás de acuerdo con las siguientes afirmaciones:
- Así como me hirió, yo también lo voy a herir.
- Quiero que sufra
- Para mí es como si no existiera.
Si no compartes esas afirmaciones, felicitaciones, es la manera de pensar de una persona que entiende que para crecer espiritualmente debe aprender a perdonar y ha trabajado en ello para lograrlo, por el contrario si estás de acuerdo con cualquiera de ellas, puedes estar seguro de que te falta camino por recorrer, necesitas trabajar el perdón para lograr perdonar.
Programas que ayudan a perdonar y sanar
Quiero compartir contigo tres programas nuevos que sirven para sanar y dejar ir para vivir una vida más plena y feliz, te ayudará a superar cualquier evento pasado que necesites perdonar.
El primero y uno de los que más llama mi atención, es el perdón a través de los sueños, hay historias increíbles de como personas con experiencia traumáticas, pudieron perdonar y sanar a través de lo que se conoce como un sueño lúcido.
Un sueño lúcido es el momento en que tienes total control del sueño y puedes actuar con voluntad propia. Esto te permite enfrentar cualquier experiencia que necesites sanar. A través de los sueños puedes acceder al inconsciente, a la máquina creadora de sueños y curar tu pasado. Puedes aprender la técnica a través de la clase online aquí.
El segundo programa es para personas que necesitan sanar relaciones de pareja, diseñado por la autora de éxitos de venta del New York Times Katherine Woodward Thomas quien a través de sus lecciones te ayuda a recuperar tu poder y sanar tu corazón. Puedes ver su clase online aquí.
Por último, puedes explorar las enseñanzas de Sadhguru como un guía espiritual registrándote en su clase online donde hablan sobre el antídoto para el dolor y el sufrimiento: y el camino hacia la dicha de por vida y responde a la pregunta de si ¿Es el sufrimiento opcional en lugar de inevitable?
Perdonar no es olvidar. Reflexiones
Perdonar no es olvidar, perdonar es dejar ir. Al perdonar, generalmente la persona no olvida las ofensas, las asume como experiencia importante para protegerse de otras agresiones y también no ofender a otros. Pero elimina la carga negativa de la experiencia.
Perdonar es una oportunidad que todos debemos darnos y merece el esfuerzo porque hacerlo nos conduce al crecimiento espiritual y a la paz interior.
Algunas personas les es difícil perdonar porque piensan que es una señal de debilidad, lo cual no es cierto. Mahatma Gandhi decía: «Los débiles nunca pueden perdonar. El perdón es el atributo de los fuertes».
Perdonar significa limpiarte por dentro, sacar el veneno que llevas dentro, liberarte del recuerdo doloroso y permitirte vivir de nuevo en paz y equilibrio, lograr reconciliarte con el pasado y seguir adelante.
Hay situaciones donde perdonar puede no ser tan complicado, mientras hay otros casos, donde el dolor causado puede hacer muy difícil practicar el perdón.
De acuerdo a la psicología positiva, la clave para transitar esas situaciones adversas, superarlas y salir fortalecidos de ellas está en el poder de tu actitud. Al cambiar tu forma de pensar, buscando siempre tener pensamientos positivos, cambiarás tu actitud, es entonces cuando perdonar se convierte en un camino que vale la pena ser transitado.
Los beneficios de perdonar están directamente asociados a sentimientos de liberación, serenidad y paz interior, también desarrollamos la empatía lo cual ayuda a mejorar la calidad de tus relaciones interpersonales.
Como decía Nelson Mandela: «El perdón: libera el alma, elimina el miedo; por eso es una herramienta tan poderosa».
El perdón es solo una de muchas prácticas espirituales. Si quieres explorar nuevas formas de crecer espiritualmente y tener momentos transformadores continúa leyendo «las 23 prácticas de crecimiento espiritual».
