Pasos Para Tener Un Cambio De Mentalidad

Lo que puede definirnos más que la forma en que pensamos es sin duda, nuestra mentalidad que define la vida que vivimos, aunque no siempre lo sepamos conscientemente.

¿Cómo tener un cambio de mentalidad? Se pueden aplicar al menos tres métodos, que incluyen el cambio de cosmovisión, el cambio de paradigma personal y el cambio de sets mentales.

La mentalidad es una cuestión muy arraigada dentro de nosotros. Está alimentada de todas las experiencias, toda la información y todas las predicciones (y/o suposiciones) que tenemos sobre el mundo en su totalidad. De la misma manera podemos tener mentalidades particulares para contextos particulares.

Podríamos estar tan aferrados a nuestra propia mentalidad, que todas nuestras decisiones, soluciones y conductas serían un producto de ella.

No hay dudas de que la mentalidad está altamente influenciada por nuestra sociedad, desde la familia a la escuela hasta las amistades, llegando a posibles afiliaciones con grupos políticos o religiosos.

Esto nos lleva a formar parte de una mentalidad colectiva de la cual es difícil salir, en caso de que no esté afectando negativamente.

Ve a la sección de recurso de expande tu mente, disponemos de los mejores programas para cambiar creencias limitantes y reprogramar la mente subconsciente.

Antes de entrar en materia, en la sección de recursos encontrarás técnicas como afirmaciones subliminales, reprogramación mental, psicología, hipnosis, mindfulness y PNL (programación neurolingüística) todas enfocados a cambios de mentalidad.

Eligiendo un tipo de mentalidad.

Existen muchos tipos de mentalidad, dependiendo de la teoría en la cual nos basamos, variando mucho la forma en que se estudia el concepto debido a cuestiones de cómo definirla, cómo medirla, cómo conceptualizar y cómo dividirla en tipos.

A continuación verás una teoría en particular, pero en su forma más básica todos hemos usado el término de mentalidad para referirnos a alguien, por ejemplo podemos decir que una persona tiene mentalidad de empresario.

Esa mentalidad constituye un conjunto de creencias y principios que lo llevan a desenvolverse de una cierta manera, la forma en la que hace negocios y la forma en que se mueve en el mundo de las finanzas.

Todos tenemos una mentalidad definida en áreas en específico en cuanto al dinero, las relaciones, la salud, por ejemplo, mentalidad de gordo, mentalidad de don juan, mentalidad fitness, mentalidad ganadora, etc

Y dependiendo de la mentalidad que adoptes conseguirás uno u otros resultados, todo tus resultados están relacionados con tu mentalidad.

Si no te gustan tus resultados lo primero que tienes que hacer es cambiar la mentalidad es el paso más importante.

La mentalidad es la raíz del problema y la solución del problema.

La conclusión es sencilla cambia tu mentalidad y cambiaran tus resultados.

Por ejemplo, una teoría sugiere que las mentalidades pueden ser una entre las siguientes:

  • Burócratas jerárquicos, que ven al mundo como un orden natural con competición y consecuencias similares a los de la selección natural.
  • Príncipes independientes, que ven al mundo como una fuerza caótica y aleatoria donde la decadencia natural es inevitable.
  • Reformadores sociales, que ven al mundo como un balance donde cada elemento aporta a la balanza para mantener una perfecta armonía de causa y efecto.
  • Revolucionarios generativos, que ven el potencial del mundo para crecer y desarrollarse a través de las interacciones y del balance armonioso de la simbiosis, donde se incentiva al cambio.

De las cuatro categorías de esta teoría, la de la mentalidad revolucionaria generativa nos da paso a ideas de carácter grupal en vez de individual, donde la simbiosis entre seres humanos y entre la humanidad y la naturaleza es respetada debidamente. 

Además, nos indica la importancia del cambio, de no quedarnos en la permanencia, como un mantenimiento del balance y un refrescamiento de la civilización. Este es un tipo de mentalidad que podemos tomar y extraer elementos para nuestras vidas personales.

La cosmovisión.

Podemos interpretar el término mentalidad también como cosmovisión, es decir, la orientación fundamental de una persona o sociedad respecto a su conocimiento y perspectiva del mundo. Aquí entran elementos tales como los valores, las emociones y la ética de una persona y de una sociedad.

Este tipo de mentalidad es de naturaleza más obvia, siendo posible para nosotros modificarla o evaluarla conscientemente, permitiéndonos examinar nuestras propias creencias y opiniones sobre distintos temas, analizándolos de manera crítica, evolucionando como personas.

Entre los subtipos de la cosmovisión se encuentran la actitud, la ideología, la filosofía y la religión, como cuatro dimensiones desde donde percibir el mundo.

La cosmovisión actitudinal.

Es nuestro enfoque de vida, la disposición que tenemos a ciertos tipos de pensamientos.

Es una actitud que tiende a dominar nuestro enfoque, comprensión, pensamiento y sentimientos acerca de algo. Las personas que tengan una cosmovisión optimista tienden a enfocar las cosas con una actitud positiva y asumir lo mejor.

Una cosmovisión ideológica.

Se refiere al conjunto de creencias y valores que una persona o un grupo asumen como normas de vida, describiéndose así sistemas de ideas e ideales que forman la base de teorías económicas o políticas.

La cosmovisión ideológica surge a partir de estas creencias políticas y económicas, como por ejemplo el capitalismo y el comunismo.

La cosmovisión filosófica.

Es una cosmovisión que engloba las respuestas dadas a preguntas fundamentales del universo, basándose en conceptos comunes y generalmente en la razón, muchas veces emergiendo de las enseñanzas de un pensador con mucha influencia.

Las filosofías existen en todas las culturas del mundo. Una persona puede tener así una mentalidad posmoderna, liberal, existencialista, etc.

La cosmovisión religiosa.

Nos referimos a un sistema de comportamientos y prácticas relacionadas a elementos espirituales, trascendentes o sobrenaturales.

Una mentalidad o cosmovisión religiosa se basa completamente en la religión de escogencia o herencia, ya sea organizada o una creencia menos institucionalizada, tal vez sincrética.

De esta manera los seguidores de religiones como el cristianismo y el judaísmo tenderán a creer y practicar dentro de sus vida de acuerdo a principios establecidos por las escrituras bíblicas, siendo sus mentalidades y cosmovisiones surgidas de la interpretación hechas por profetas de la palabra de Dios.

La ciencia del paradigma aplicada a la vida personal.

Si deseamos cambiar nuestra mentalidad desde una negativa a una positiva, o simplemente de una actual a una versión mejorada y superior, vale la pena interesarse por el concepto de paradigma.

Un paradigma es un concepto científico y filosófico, usado para describir el conjunto particular de conceptos, patrones de pensamiento, teorías, métodos de investigación, postulados y estándares de una contribución a un campo o disciplina.

Es un concepto que aunque le sea pertinente mayormente a la ciencia, nos ayuda a entender cómo el conocimiento puede ser algo relativo, y que aquello en lo que creíamos ayer puede que no aplique mañana, y ahí será necesario que nos ajustemos mediante un cambio de paradigma para poder entender mejor el mundo, una vez nuestro paradigma anterior ya no nos dé suficientes explicaciones o resultados positivos.

Los cambios de paradigma son el resultado natural de las ciencias, donde se da una transición de un paradigma a otro a través de una revolución científica. 

Estos cambios tienden a suceder en respuesta la acumulación de debilidades críticas dentro de un paradigma actual, así como debido a la propuesta de una nueva teoría que tenga el poder de englobar tanto la información vieja que sea relevante como la explicación de elementos anteriormente inexplicables.

Esta nueva teoría puede además cambiar la forma en que explicamos un fenómeno.

Algunos ejemplos de cambio de paradigma que podemos tomar del mundo científico son: la transición del juicio clínico a la medicina en base a la evidencia, la transición de la teoría de inteligencia artificial clásica a la teoría de datos, y, uno de los ejemplos más famosos, la transición desde la mecánica de Newton a la relatividad espacial de Einstein.

En contraste al cambio de paradigma está la parálisis de paradigma, la inhabilidad o rechazo de una comunidad científica para ver más allá de los modelos actuales de pensamiento, como lo fueron el rechazo de la teoría heliocéntrica del sistema solar de Copérnico y Galileo en los siglos XVI y XVII respectivamente.

Teniendo en cuenta el sesgo de confirmación

Los psicólogos se han referido a estas parálisis de paradigma como resultado del sesgo de confirmación, la tendencia a buscar y favorecer solamente aquella información que confirme o fortalezca nuestras propias creencias personales e hipótesis.

Se trata de un error de juicio que aunque negativo suele ser natural como un mecanismo para defender nuestra cosmovisión.

Podemos aprender unas cuantas cosas del fenómeno del paradigma y del cambio de paradigma en el mundo de las ciencias.

Sí incluso en un campo donde se busca la mayor precisión posible suelen haber momentos clave donde todos los miembros de una comunidad científica deben cambiar su paradigma para aceptar otro que se ha demostrado que es mejor y que ayudará a mayor progreso científico, entonces nosotros también podemos hacerlo desde un contexto personal, donde dejamos atrás las ideas y hábitos nocivos para nuestra salud mental y física en favor de una filosofía de vida mejorada.

Como el sesgo de confirmación es también un fenómeno dentro de los paradigmas científicos, también podemos aplicarlos a nuestra propia forma de vivir, e incluso con más facilidad, pues el sesgo de confirmación es una tendencia que viene desde adentro de las personas.

Es decir, debemos recordar que si al rechazar las ideas de otras personas, puede que sea porque no queremos despegarnos de las creencias con las cuales percibimos el mundo.

Aunque sea un mecanismo de defensa se debe entender que es un acto irracional y sobre-emocional, que amerita una introspección para considerar genuinamente las ideas propuestas, y tomar la decisión de mantener nuestras creencias previas o tal vez combinarlas con nuevas creencias para una perspectiva más completa de vida.

La rigidez y el set mental.

Otra forma de definir la confirmación de sesgo en la psicología es la rigidez, que es la inhabilidad para cambiar, o el rechazo para apreciar el punto de vista de otra persona, o incluso un conjunto de emociones caracterizadas por la falta de empatía. 

Al igual que el sesgo, se refiere a la tendencia para defenderse a uno mismo, aunque sea a través de la inhabilidad para cambiar hábitos y de modificar conceptos y actitudes que ya han sido desarrollados previamente.

Es importante tomar en cuenta la existencia de rigidez dentro de nuestra propia mentalidad, de igual manera que conocer el concepto del set mental.

Los sets mentales representan una forma de rigidez en el que la persona se comporta o en lo que cree de una manera particular debido a su experiencia previa.

En el campo de la psicología, los mental sets son examinados durante el proceso de solución de problemas, haciendo énfasis en el proceso de salirse del set mental (mentalidad) para realizar una introspección.

El romper con sets mentales para poder resolver exitosamente los problemas puede dividirse en tres etapas:

  1. La tendencia a resolver el problema de una forma específica.
  2. No resolver el problema al aplicar métodos tomados de experiencias pasadas.
  3. Dándose cuenta de que la solución requiere métodos diferentes.

Los componentes de nuestro funcionamiento mental cognitivo, como lo son la memoria y la inhibición, son elementos esenciales para realizar un cambio de mentalidad o set mental efectivo en diferentes situaciones. 

Las diferencias individuales en los sets mentales de distintas personas pueden variar, por lo que los métodos nuevos que elegimos para afrontar una situación suele ser de preferencia personal según nuestros propios criterios y nuestras propias necesidades.

Esto es algo que recordar a la hora de un cambio en nuestro tipo de cosmovisión, un cambio de paradigma o un cambio de set mental, todos los cuales podemos englobar en el desafío del cambio de mentalidad: debemos ser creativos y utilizar todas las herramientas particulares que estén a nuestro favor.

Pues en cada situación que nos encontremos, aunque podamos tomar consejos de otros, será una experiencia personal donde nos debemos vencer a nosotros mismos, dejando atrás la rigidez y el rechazo a nuevas ideas, para tomar lo mejor de los consejos que nos den, y aplicarlos a la situación o a la vida general de la manera en que nos pueda funcionar particularmente a nosotros.

¡Hay que tener flexibilidad mental!

En expande tu mente encontrarás los mejores recursos para conseguir un cambio de mentalidad.

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